Álvaro Obregón
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Roma Norte
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Durante los últimos meses, hemos escuchado sobre el fenómeno de la Gran Renuncia. Se ha intentado encontrar una razón detrás de éste, sin embargo, nos encontramos con un problema de alta complejidad. Ya no podemos definirlo más como un ‘fenómeno’, sino una realidad global a la cual debemos enfrentarnos.
Desde la fundación de la primera compañía discográfica, Columbia Records, en 1889, la industria de la música ha cambiado y hoy vive su momento de mayor aceleración, pues las nuevas necesidades de trabajadores y consumidores abren muchas más oportunidades de las que nos imaginamos.
En la última semana el mundo se ha conmocionado y unido a la causa del movimiento antirracista, después de la muerte de George Floyd en Estados Unidos y nos ha llevado a un tiempo de reflexión como raza humana. El racismo se vive de diferentes maneras alrededor del mundo, México no es la excepción.
Al trabajar de manera remota, la productividad y agilidad con la que trabajamos se puede ver altamente afectada. Para poder optimizar la operación, es importante adaptarnos a nuestra realidad y generar hábitos nuevos que promuevan la eficiencia y el trabajo ágil en nuestros procesos.
La pandemia ha creado caos y devastaciones mundiales, y al mismo tiempo ha alineado esfuerzos tecnológicos y científicos para atender necesidades y detectar nuevas oportunidades que sin duda nos llevarán a la siguiente fase como seres humanos.
Actualmente, la gente tiene una mayor disposición a compartir información si obtiene como beneficio experiencias personalizados que cubran dichas necesidades. Este concepto, al que llamamos Mass Personalization, es la única manera para generar valor compartido, un paciente a la vez.
Ser una Marca Responsiva conlleva diversas responsabilidades dentro de las cuales además de liderar, se debe estar dispuesto a aprender y escuchar. Es importante ser responsivo, receptivo y responsable. Entonces, ¿qué rol que juegan estas marcas dentro de los movimientos y protestas sociales?
Las ciudades buscan regresar a sus actividades normales. Sin embargo, muchas de las dinámicas no volverán a ser igual; el confinamiento, distanciamiento social, nuevas formas de consumo, etc. son actividades que marcaron nuestro día a día para integrarse en la nueva normalidad.
El impacto económico que ha provocado la pandemia de Coronavirus ha cambiado la cultura organizacional para siempre. Ante esta situación, es necesario preguntarnos, ¿qué debo hacer para crear una cultura responsiva de pensamiento ágil que se adapte a los cambios externos?
¿Cómo podemos crear, mejorar y diseñar experiencias innovadoras fuera del restaurante tradicional que respondan a las nuevas necesidades y prioridades de seguridad, higiene y reconstrucción de identidad, tanto de consumidores usuales como de nuevas generaciones?
Hasta antes de la crisis, todos teníamos —o queríamos— un espacio de trabajo moderno. Diseñamos oficinas con la infraestructura necesaria para fomentar relaciones y construir comunidades. Ahora, las necesidades han cambiado. Los espacios de trabajo deben convertirse en lugares seguros.
En tiempos de crisis las compañías deben crear una cultura responsiva que acelere la capacidad de aprender y responder al cambio de manera ágil. Lograr esto, implica replantear roles, proceso y comportamientos en los colaboradores que respondan a las nuevas necesidades del negocio.
Las soluciones ante la emergencia sanitaria así como los cambios de hábitos debido a la pandemia han incrementado el uso del plástico hasta en un 62% en algunos países lo cual podría llevarnos a un impacto ambiental tan significativo que será imposible dar vuelta atrás.
A lo largo de la historia, las marcas han tenido que han reinventarse según el contexto que las rodea. Sin embargo, aunque unas lo hacen por ‘trend’, otras lo hacen para atender las nuevas necesidades de la gente. A partir de la pandemia, hemos encontrado un nuevo tipo de marca: las Marcas Responsivas.
En el panorama actual de cambios constantes, es indispensable encontrar la manera de diseñar una cultura responsiva que habilite la adaptación de la organización a cambios externos. Para ello, es vital fomentar una cultura de experimentación entre todos los colaboradores.
En todo el mundo, muchas empresas e industrias se están viendo afectadas por la situación actual, entre ellas, la industria restaurantera. Sin embargo, este ‘New Normal’ que llegó a nosotros de manera inesperada, nos ha enseñado que debemos reinventarnos si queremos lograr un crecimiento.
Los seres humanos estamos programados para conformarnos a nuestro entorno y nuestro cerebro, prefiere decir y hacer lo socialmente aceptable, en lugar de expresarse y tener otro punto de vista. Sin embargo, esas reglas generan barreras frente a grandes oportunidades.
Es importante estar bien preparados antes de una entrevista de trabajo. Sin embargo, generalmente existen incongruencias entre lo que estamos diciendo y lo que el cuerpo está comunicando, por lo que debemos asegurarnos de utilizar nuestros gestos de manera correcta.
Todos tenemos al menos una idea millonaria dentro de nosotros. Entonces seguro te preguntarás, por qué aún no eres millonario. Sin embargo, el problema no es la falta de ideas sino que todas esas ideas, se quedan el aire y pocas veces, son ejecutadas de la manera correcta.
HBR describe el ADN de un verdadero innovador con una serie de características, que llevadas a la acción, nos permiten generar ideas estratégicas de negocio que dan resultados tangibles. Como Thrusters, la forma en la que pensamos incluye este proceso innovador.
Compartir conocimiento y empoderamiento a través de casos de estudio y recomendaciones específicas con estudiantes es la forma en la que Thrust Co. aporta su granito de arena al sector educativo para inspirar a las nuevas generaciones a crear un cambio verdadero en nuestro país.
En México la brecha de equidad de género en empresas se reduce cada vez más, sin embargo la misma gente no cree que sea un problema ni que se pueda obtener grandes beneficios. Un cambio de mentalidad es fundamental para que todos tengamos las mismas oportunidades.
Las metas nunca se acaban pero tres pasos pueden ser los necesarios y únicos para decidir cuáles valen la pena ser perseguidas. La clave no está en trabajar más para sentir que cada vez nos acercamos rápidamente a la meta, sino en encontrar las actividades que apoyen el propósito.
La industria de Real Estate en México está dando un giro de 180 grados. Si los desarrolladores comienzan a pensar más en la creación de comunidades de valor, podrían mejorar su percepción a ojos de los consumidores y revolucionar a la industria para un futuro más rentable.
Antes de la Revolución industrial, el consumo era muy sencillo, se compraba lo que se necesitaba. Sin embargo, como parte del proceso evolutivo del ser humano, la manera en la que trabajamos y consumimos ha cambiado mucho en los últimos años, satisfaciendo aún más necesidades.
La industria micro financiera está en un momento de aparente desaceleración, atribuido a diferentes factores. Por ello, se identificaron cinco áreas estratégicas, susceptibles a la innovación, logrando evolucionar a las instituciones micro financieras a dar el brinco al siguiente nivel.
Vivimos en un mundo que se mueve cada día más rápido, con más juntas, más bomberazos, más entregables y pareciera que menos tiempo... ¿Cómo podemos tachar la lista de pendientes y cumplir con los compromisos de trabajo–y sociales–sin morir en el intento…?
Álvaro Obregón
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