En colaboración con Anagrama+Solvar diseñamos nuestras oficinas con el objetivo de inspirar. La arquitectura y diseño son reflejo de nuestro labor y propósito. Cada esquina tiene una particular razón de ser; desde impulsar la creatividad, hasta nutrir el pensamiento estratégico y transformar el diseño antropocéntrico, centrado en el usuario. Nuestro espacio de trabajo posibilita y mejora resultados.
Como CEO y cofundador coordino el área estratégica de Thrust de forma integral y desde nuestras seis competencias. Disfruto mucho trabajar con líderes ambiciosos y ayudarlos a convertir sus negocios en organizaciones Full-Purpose capaces de redefinir la industria y de representar algo auténtico tanto para sus clientes como para sus empleados.
Antes de fundar Thrust, fui socio fundador en MBLM (emblem), una firma de consultoría independiente con presencia en cuatro continentes, asesorando a compañías y CEOs de una amplia gama de industrias, como Alsea, American Century Investments, AT&T, Banco Azteca, Creel, Chevez, Consejo de la Comunicación, Comex, Deutsche-Ixe, Endeavor, Grupo Modelo (AB/InBev), Kraft, Mabe, MasterCard, Mexichem, Nestlé, Pfizer, Sala Uno, Unilever, Secretaría de Fomento Turístico de Yucatán, entre otras.
Con antecedentes mixtos en gestión empresarial, innovación, marketing y diseño estratégico —coleccionados en Estados Unidos, Europa y Latinoamérica— mi experiencia incluye roles muy diversos. Fui, desde desde orador clave internacional y profesor visitante, hasta miembro de la junta directiva de una organización privada sin fines de lucro y presidente de una transnacional.
Para mí el diseño, es una actividad viva, dinámica y trascendental que se encuentra en constante transformación. Es un mecanismo que genera valor y un componente fundamental para el crecimiento y el desarrollo de nuestra sociedad, lo que lo convierte en un motor de cambio. La estrategia es el complemento perfecto que nos permite ver el problema desde adentro, explorar y entender a fondo las causas sistémicas de problemas complejos a los que nos enfrentamos hoy en día y generar rutas viables y operables que permitan anticiparnos, adaptarnos y responder a ellos.
En palabras de Herbert Simon “diseñar es crear cursos de acción que están destinados a cambiar situaciones existentes en situaciones favorables”, y, por lo tanto, diseñar implica pensar y actuar de manera estratégica. Mi trabajo como Strategy Thruster es comprender a fondo cómo se conectan los diferentes componentes de un problema, utilizar un enfoque empático y centrado en el usuario para identificar las preocupaciones, motivaciones y necesidades más profundas de las personas y desarrollar estrategias integrales que permitan a los clientes y organizaciones hacer frente a la incertidumbre y el cambio emergente.
Siempre he creído que el mundo está lleno de patrones, que existe un caos ordenado y que cada elemento es esencial. Estos conocimientos los podemos aplicar a las empresas para definir cuál es su rol único y el nivel de impacto que pueden tener para formar una mejor sociedad.
Mi trabajo en Thrust es entender a fondo como funcionan diferentes industrias, desde las necesidades del target hasta los diferentes jugadores internos de una empresa, para crear estrategias enfocadas en generar crecimiento exponencial de cada uno de nuestros clientes y a su vez que ellos aporten valor a la vida de sus consumidores.
Cuando Paul Rand dijo que «todo es diseño», tenía razón. Todos los días estamos en constante contacto con el diseño, porque todo lo que ha sido creado por el hombre lo es. Por eso me enamoré de esta disciplina: me di cuenta de que está en todo lo que vemos y de que nuestro campo de trabajo se extiende infinitamente en y hacia todas las direcciones.
Decidí unirme a Thrust por su gente, su cultura y su trabajo, porque cuando esos elementos se fusionan, me dan la oportunidad de hacer lo que más me llena: crear proyectos capaces de producir un impacto positivo en la sociedad, mientras ayudamos a nuestros clientes a ir más allá.
Steve Irwin dijo una vez que «en el fondo, la educación se trata de que algo te emocione». He descubierto una pasión por aprender sobre cualquier materia, y considero al conocimiento la mejor herramienta para promover el progreso social y el cambio verdadero. Entender los qués, cómos y porqués del mundo nos da una imagen más completa y nos exhorta a tomar decisiones eficientes que tienen la mirada clavada en el futuro. Como Insights Thruster, mi rutina diaria es utilizar mi deseo de conocimiento y mi capacidad de asombro para unir puntos y buscar soluciones que destaquen y propicien el bienestar.
El eclecticismo me ha llevado a una variedad de proyectos que agregan valor a mis perspectivas de cómo impulsar el crecimiento. Ha sido un viaje muy loco que me ha permitido impactar positivamente en la sociedad: como maestro del Modelo de las Naciones Unidas, coordinador de un programa educativo para personas de bajo recursos, neurocientífico, psicólogo, y ahora... Insights Thruster.
Hay dos cosas principales que me motivan: el conocimiento y el pensamiento analítico. Me esfuerzo todos los días para aprender cosas nuevas con el fin de lograr un pensamiento estructurado y un giro creativo, y así encontrar soluciones estratégicas para problemas reales. Creo que cualquier solución innovadora tiene la obligación de estar fundamentada tanto en lo intelectual como en lo estratégico. Es por eso que estoy en constante búsqueda de patrones sociales, económicos y de comportamiento que me permitan pensar en el futuro y ayudar a que el mundo evolucione.
No tengo duda de que para prosperar como ser humano tienes que formar parte de algo en lo que creas y que sea más grande que tú… eso encontré en Thrust. Mi filosofía de vida se define claramente con esta frase de Noam Chomsky: «El optimismo es una estrategia para construir un mejor futuro. Porque a menos que creas que el futuro puede ser mejor, es poco probable que des un paso adelante y asumas la responsabilidad de que así sea».
Mi amor por el diseño nació el día que realmente entendí la responsabilidad con la cual carga esta disciplina, jugando un rol inmenso en infinitos ámbitos de nuestra vida cotidiana. El diseño tiene el poder de mover masas, cambiar comportamientos y modificar la forma en la cual interactuamos. Es una mezcla armónica y balanceada entre la belleza de lo creativo y la brillantez de lo funcional, de aquello que tiene un propósito que va más allá. Mi compromiso a nivel personal y profesional es, a través de estas herramientas, dejar el mundo mejor de lo que lo encontré, además de aprender, absorber y cuestionarme en el camino. Sé que esto empata con la misión que tenemos en Thrust y confío plenamente en los valores, esfuerzos y talentos que tenemos como equipo, siempre buscando soluciones estratégicas y responsivas para crear un mejor futuro.
“No hay nada más bonito que una cuenta cuadrada a la perfección.”
Mi pasión siempre ha sido hacer presupuestos, cuentas y llevar el orden de proyectos, esto pensándolo en negocios, ideas independientes o incluso para planes con amigos. Cuento con más de ocho años de experiencia en el mundo financiero y veo a la planeación estratégica como el gran 'core' de una empresa. Es por esto que generar las acciones financieras y administrativas para lograrlo es algo que me encanta.
En Thrust, me dedico a poner orden a todo lo que sostiene a nuestros proyectos: contratos, cuentas, presupuestos, pagos, etc. Me aseguro que nuestros números y procesos estén alineados a la visión del negocio y garanticen nuestro crecimiento.
Me gusta trabajar con líderes visionarios para ayudarlos a convertir sus negocios en organizaciones Responsivas, empujándolos a dar un salto que redefina la industria, y detonando valor compartido hacia sus clientes, colaboradores y hacia la comunidad en general.
La "magia" comienza cuando mezclo big data con investigación y cultura, construyendo un puente entre los retos del mundo real, y los sueños y habilidades de las nuevas generaciones. El resultado: nuevas posibilidades; tanto en el ámbito laboral, como en el curso de la historia.
Me encanta trabajar en un ambiente creativo: es desafiante y a la vez gratificante estar rodeada de formas innovadoras de pensar. Desde el 2017 me uní a Thrust, y desde entonces he estado involucrada en proyectos muy interesantes de distintos sectores, incluyendo salud y medios.
El diseño es una actividad viva, dinámica y trascendental que está en constante transformación. Es un mecanismo que genera valor y un componente fundamental para el crecimiento y el desarrollo de nuestra sociedad, lo que lo convierte en un motor de cambio.
Siempre he creído que el mundo está lleno de patrones, que existe un caos ordenado y que cada elemento es esencial. Estos conocimientos los podemos aplicar a las empresas para definir cuál es su rol único y el nivel de impacto que pueden tener para formar una mejor sociedad.
Todos los días estamos en constante contacto con el diseño, porque todo lo que ha sido creado por el hombre lo es. Por eso me enamoré de esta disciplina: me di cuenta de que está en todo lo que vemos y de que nuestro campo de trabajo se extiende infinitamente en y hacia todas las direcciones.
He descubierto una pasión por aprender sobre cualquier materia, y considero al conocimiento la mejor herramienta para promover el progreso social y el cambio verdadero. Entender los qués, cómos y porqués nos exhorta a tomar decisiones que tienen la mirada clavada en el futuro.
Hay dos cosas principales que me motivan: el conocimiento y el pensamiento analítico. Me esfuerzo todos los días para aprender cosas nuevas con el fin de lograr un pensamiento estructurado y un giro creativo, y así encontrar soluciones estratégicas para problemas reales.
Mi amor por el diseño nació el día que realmente entendí la responsabilidad con la cual carga esta disciplina, jugando un rol inmenso en infinitos ámbitos de nuestra vida cotidiana. El diseño tiene el poder de mover masas, cambiar comportamientos y modificar la forma en la cual interactuamos.
“No hay nada más bonito que una cuenta cuadrada a la perfección.” Mi pasión siempre ha sido hacer presupuestos, cuentas y llevar el orden de proyectos, esto pensándolo en negocios, ideas independientes o incluso para planes con amigos.
Si buscas una taza de café que te eche a andar y te cambie la vida, Cucurucho es el lugar. Recomendación: pide el macchiato.
Mikasa es la joya de nuestra barrio. La comida japonesa es auténtica, fresca, asequible y generosa.
Los thrusters vivimos al cien, y Síclo es el lugar perfecto (y el más divertido) para energizarnos y liberar el estrés.
Rosetta es el lugar de encuentro entre el desayuno y el pan dulce. Además, la caminata hacia ahí le resta la culpa al placer mañanero.
La Cantina Riviera del Sur tiene el balance perfecto para tomar algo después del trabajo, un brindis de festejo o una fiesta de despedida.
Caravanserai es la “maison de thé” favorita de la ciudad, y nuestro lugar oficial cuando buscamos balance o inspiración espiritual.
La Librería Rosario Castellanos es nuestra favorita para encontrar títulos de innovación, negocios y estrategia.
Ice Cream Nation es perfecto para cualquier momento: celebrar grandes ideas, buscar inspiración, o darte energía para aguantar el día.