Investigadores de la Academia de Ciencias en China (2016) hablan de lo programados que estamos para conformarnos a nuestro entorno y cómo nuestro cerebro, muchas veces, prefiere decir y hacer lo socialmente aceptable, en lugar de expresarse y tener otro punto de vista. Sin embargo, no podemos permitir que esas reglas nos creen barreras frente a grandes oportunidades.

Por ejemplo, en el reino animal, los pájaros utilizan sus plumas, formas y colores para volverse llamativos en su entorno; si para ellos esto habla de su instinto, para el hombre no debería ser distinto. Todo se trata de distinguirse del resto y si la gran pregunta es cómo, la respuesta es… inspiración.

Los orígenes del hip-hop, es ejemplo de una gran industria que hizo hasta lo prohibido para ser diferente. Su historia representa a una cultura que se negó a ser discriminada y olvidada; que a través de su originalidad y estilo pudo crear una de las tendencias más relevantes del zeitgeist. 

Nueva York en los 70 dio inicio a esta historia con los suburbios enfrentando la violencia, manifestaciones, pobreza y pandillas luchando por un fin común. En los barrios de Harlem, Brooklyn, Queens y Bronx comenzó a surgir el deseo por distinguirse, por expresar su hermandad y sus ideales. La manera de diferenciarse entre sí fue a través de “códigos” en su manera de vestir, comenzando el arte de la personalización y donde la ropa se convirtió en un lienzo de inspiración para la cultura hip-hop.

Entonces, ¿de dónde surge toda esta inspiración? Los psicólogos expertos en el tema, T. Thrash y J. Elliot (2003), han detectado tres aspectos en los que el ser humano puede encontrarla:

1. POR EVOCACIÓN — Sugerencia espontánea, algo que llega sin planearse.
   “Los colores del hip-hop vienen del grafitti.” – Ralph McDaniels (DJ y director cinematográfico)
   Los colores de moda eran los disponibles en latas de aerosol. Los seguidores de la cultura hip-hop usaban el grafitti en su ropa dibujando sus nombres e ilustrando escenas de su día a día, tomando lo que tenían a la mano para expresar su arte.
2. POR TRASCENDENCIA — Convertir el descontento en herramientas y oportunidades productivas.
   Uno de los pioneros de la moda urbana en la cultura del hip-hop fue el diseñador Dapper Dan, quien trabajó por la comunidad afroamericana al verse discriminado por las grandes marcas de lujo. Dan adaptó lo que todos veían como estatus y lujo, para crear un estilo propio que satisfaciera las necesidades de su comunidad. Su visión fue tan grande que hasta el día de hoy sigue generando gran impacto; en el 2017, Gucci lo contactó para hacerle un tributo y recrear looks icónicos que diseñó en los 80 para presentarlos como parte de la colección y colaborando con él para la campaña.
3. POR MOTIVACIÓN ENFOCADA — Transformar la auto percepción de tus capacidades y abrirte a la posibilidad de lograr algo que pensabas imposible.
   A principios de los 90, nacieron programas de TV como “In Living Color” y “The Fresh Prince of Bel Air”, con jóvenes ícono de la cultura hip-hop como protagonistas. El diseñador Carl Jones, confiando en su talento, se acercó a ellos para ofrecerles su línea de ropa, la cual estaba influenciada por lo que veía todos los días en los suburbios de Nueva York. Darse a conocer de esta manera, ayudó a la cultura a posicionarse en el mainstream de la época para llevarlo posteriormente a un mercado internacional.

Para 1996, el movimiento que representaba al hip-hop creció tanto que se había convertido en toda una industria, sobrepasando los límites de las clases sociales. Los personajes de esta cultura rompieron paradigmas de segregación y conformismo que se vivían comúnmente, generando relevancia, demanda y creando ideas que se mantienen hasta la fecha. En la industria musical, la presencia de esta cultura no pasa desapercibida. Cantantes como Snoop Dog, Pharrell Williams, Beyoncé, Drake y muchos más han sido protagonistas de eventos masivos como los Grammy Awards, teniendo más del 60% de recurrencia y aumentando cada año.

Lo mismo en el mundo de la moda. Desde diseñadores hispanos y afroamericanos como Kanye West, directores creativos como Virgil Abloh (Louis Vuitton Men) y grandes trendmakers como Rihanna, han sido los responsables de dictar el rumbo de las tendencias y estilos a nivel internacional; no tienen miedo de ser, de explotar su inspiración.

La industria del hip-hop genera aproximadamente $10 billones de dólares al año, rompiendo la etiqueta de “mundo del entretenimiento”, convirtiéndose en un estilo de vida, en un prueba viva y tangible de que la evolución de la cultura rompe barreras y crea puentes interculturales que valen la pena aprender y adoptar.

Aunque pasa el tiempo, lo que nos enseña la cultura del hip-hop es que entre más arriesgas, más respeto ganas. Cuando alguien se motiva y transforma lo que tiene enfrente, crea algo de valor para expresar lo que nadie más hace. Pueden surgir nuevos caminos en la historia que influyan no solo la manera en cómo se visten los demás, sino también lo que escuchan, compran, piensan y, mucho más importante, lo que hacen y defienden. 

Sea cual sea tu ambición, debes ubicarte en un entorno con personas que te inspiren a aprender y crear. Que lo que uses, hagas y pienses sea un reflejo de quién eres para que tu visión y espíritu traspasen cualquier situación y temporalidad. Nuestro estilo, la consecuencia de nuestra inspiración, es lo que para nosotros representa éxito, no hay excusas para frenarse, pues la inspiración y creatividad llegan de cualquier lugar.

“You have to allow the person you are today to die, so that you can give birth to the person you are meant to become.”
— Les Brown

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